La política de relanzar en Wii viejos títulos de Game Cube ha sido una constante desde su nacimiento. Ya el doble estreno Cube/ Wii con Zelda TP hizo ver a los usuarios por donde podrían ir los tiros. Los 'New Play Control' de Nintendo son el máximo exponente de esta sencilla forma de sacar unos cuatros adicionales a los usuarios, pero la última jugada de Capcom es de premio: el único capítulo exclusivo desarrollado para una consola Nintendo e integrado en la trama principal de la serie ve la luz, de nuevo, en un disco sin ningún añadido extra -salvo su traducción- que justifique su compra, a no ser que se desee completar la saga y no se encuentre el juego original.
Resident Evil Zero se lanzó para Game Cube en 2002 y es, hasta el momento, la única entrega exclusiva para la compañía. Usando el motor gráfico del remake de Resident Evil, lanzado unos meses atrás para el cubo, la acción se sitúa unas horas antes del incidente de La Mansión de Racoon City. Un peligroso preso fugado se refugia en un tren de lujo mientras un equipo paralelo de S.T.A.R.S sufre un accidente cuando apoyaban al grupo protagonista de la primera aventura. En la piel de Rebecca Chambers el jugador se adentra en el tren sin saber que su destino queda unido al de Billy Coen cuando el tren se pone en marcha rumbo a una pesadilla difícil de olvidar.
No es la primera vez que se relanzan los títulos de la saga para otras consolas; ya las entregas clásicas de PSX vieron conversiones idénticas para Game Cube, así que este disco para Wii es el camino ideal si los jugadores desean tener la saga ordenada y disponible en su máquina. No se ha tocado nada y solo se ha añadido el uso del mando de Wii, pero sin sensor de movimiento. La mejor forma de disfrutar de la aventura es hacerlo con el mando de Game Cube o en su defecto, con el control del mando clásico de Wii.
La gran novedad reside en alternar el control entre los dos personajes protagonistas, dando órdenes al secundario, controlando a ambos a la vez y resolviendo puzzles donde el uso de los dos caracteres es imprescindible. Tras jugar a las adrenalíticas cuarta y quinta entregas es de agradecer volver a un sistema de juego pausado y tranquilo, con las cámaras fijas creando puntos de vista forzados y demenciales y donde la habilidad del jugador se ve medida en cada movimiento dado. La banda sonora, efectos de sonido, escenas grabadas, diálogos etcétera son puro Resident Evil y serán, sobre todo, los seguidores de la saga quienes saquen todo el jugo a esta precuela creada con la intención de exprimir un poco más el canon clásico de la serie.
Si se está buscando completar la serie y no aparece ningún disco de Game Cube de segunda mano, adquirir esta copia estará justificado. El tren, la iglesia, laboratorio, fábrica y resto de escenarios esperan a los valientes que osen adentrarse en los orígenes de la saga. Resident Evil Zero fue un buen juego en su momento y una curiosa anécdota en la actualidad que encierra un buen par de días de diversión terrorífica.