Durango era el nombre provisional, Xbox 720 el que la prensa le adjudicó. Y si se cumplen los últimos rumores, Xbox, así, sin más, el definitivo. Microsoft volvería así al nombre con el que hizo su incursión en el videojuego para competir con Playstation 2 y Gamecube, en un movimiento de reutilización de nombre nunca visto anteriormente en las consolas.
Si la idea es algo confusa y presenta sus lagunas, quienes la defienden la apoyan en la idea de que es convertir la marca en un genérico a la altura de PC o Mac, y a partir de ahí permitir que otros nombres giren a su alrededor. Sería el caso de X-Surface, un tablet adaptado que por sí mismo sería un sistema portátil (durante varios meses se ha especulado con la opción de que Microsoft adapte un tablet a las necesidades del videojuego) que con sus 7 pulgadas tendría varias funcionalidades coordinadas con la susodicha Xbox.
En cuanto a la consola en sí, se habla de que hay quien ha presenciado cómo ejecuta ya demos desarrolladas por Unreal Engine 3 a 60 fps con total solidez, y se dan descripciones técnicas que sitúan a su procesador con 1.6GHz y 8 núcleos CPU, probablemente de AMD, y un GPU de 800MHz GPU con 12 núcleos. Contaría con 8 generosos gigas de Ram, montaría Blu Ray de serie y tendría puertos USB 3.0.
Recientemente Kazuo Hirai, CEO de Sony, declaró a propósito de qué consola saldría a la venta antes, su Playstation 4 o la Xbox de la compañía: "¿para qué ser primero, cuando tus competidores pueden ver tus especificaciones y hacer entonces algo mejor?". Quizá en Sony ya estén trabajando con estos datos... aunque quizá no sean del todo ciertos.