Rebellion supo capturar de forma magistral el espíritu de la saga en su primera incursión, conquistando a crítica y jugadores cuando lanzaron Aliens Vs Predator en 1999.Por eso nos alegramos tanto cuando sega confirmó su continuación, a pesar de tener que sufrir el lamentable retraso de “Alien Colonial Marines” la interesante propuesta que por el momento está en manos de Gearbox.
Aliens vs Predator se divide en tres campañas principales de diferente duración: La más importante y la más larga es la protagonizada por el marine, seguida por la del depredador y por último la del Alien. Afortunadamente las tres están desbloqueadas desde el inicio, por lo que podemos comenzar la que más nos interese sin tener que finalizar las anteriores.
En la parte jugable, la campaña del marine es sin duda la que mantiene una jugabilidad más clásica de un shooter, en las que se ha integrado de forma bastante acertada las particularidades propias de las películas de aliens para conseguir ser fiel en la medida de lo posible. Jugar como marine es la parte más “acongojante”, la mayor parte del tiempo avanzaremos en la oscuridad, con una linterna que parece comprada en un todo a cien por lo mal que ilumina y con el breve auxilio del lanzamiento de bengalas, afortunadamente infinitas. Avanzar con el radar, llenar todos los rincones de esas bengalas (hasta el punto de que si viene alguien detrás no podrá pasar por la acumulación) y tratar de sobrevivir a los violentos y esporádicos ataques de los aliens serán nuestra prioridad.
El armamento para hacerlos frente parte de una pistola con munición infinita para irse ampliando poco a poco con recortadas, ametralladoras o lanzallamas. Dependiendo de la situación la ametralladora y la recortada suelen ser las más eficaces, ya que la pistola no tiene mucha potencia y el lanzallamas puede provocar que un enemigo que se nos echa encima lo haga envuelto en llamas mientras termina de morir. También tenemos que tener en cuenta una máxima a la hora de los enfrentamientos con aliens, su sangre se compone de ácido concentrado, lo que conlleva nuestra muerte en aquellas ocasiones en las que disparamos a quemarropa.
Qué eres, hijo de satanas…
Jugando como Depredador deberemos aprender a utilizar sus ya conocidas habilidades: Camuflaje, visión térmica, cañón, etc.… si bien su punto fuerte sigue siendo el combate cuerpo a cuerpo, compartiendo con el alien dos tipos de ataque, uno más rápido y débil y otro más lento y letal. Lo realmente divertido utilizando el depredador, es hacer uso de sus habilidades en sigilo y camuflaje para realizar ataques inesperados, utilizando recursos tan útiles como aplicar voces a puntos concretos del escenario y atraer así a nuestras víctimas inocentes. Cabe destacar el tremendo poder de ataque que tiene el depredador, con el realizaremos auténticas carnicerías, sobre todo con los enemigos humanos. Cualquiera que haya viso sus películas ya sabe que el deporte preferido del depredador es arrancar la columna a sus víctimas de un tirón, con el cráneo incluido. Este movimiento es uno de los que podremos realizar, resultando incluso más gore al dejar la cabeza completa durante unos instantes a la vista. Vaya por delante el evidente +18 que luce el juego en la portada, a todas luces merecido, pero reflejar la violencia presente en el mundo de sus protagonistas era algo muy necesario para resultar fiel y creíble.