Un 62 en IGN. Un 77 en Game Trailers, en lo que es una de las puntuaciones más altas recibidas. No alcanza el aprobado con un 40 en Eurogamer. Y lo peor es que en esa línea van todas las puntuaciones que ha recibido la tercera parte de Lost Planet, un juego que cabe concluir no ha logrado estar a la altura de la franquicia y que en su lugar la ha arrastrado a lo que de forma casi unánime muchos concluyen que es una clara mediocridad, a pesar de intentarlo con esfuerzo en varios tramos.
"Nada está realmente roto, pero hay una sensación extraña. Al final jugar a Ice Planet 3 es como aceptar un trabajo en un planeta helado y remoto: hay muchas cosas mecánicas pero hay momentos brillantes que te quitan el aliento". Eso es de lo mejor que puede leerse, y pertenece al citado análisis de Game Trailers.
"Los dos primeros juegos se equilibraron bien con tramos de diversión directa; el tercero sencillamente no tiene suficiente energía térmica para superar sus numerosos problemas". "El diseño de niveles es complicado en los exteriores, es tan estrecho y dividido por tiempos de carga que cuesta diferenciar y complica la sensación de libertad; pero los interiores están unidos de forma perezosa". Y así siguen.
Tan solo falta por ver si el público pasará por encima de estos defectos y guiado por el buen nombre que había cosechado hasta la fecha las ventas no languidecen en exceso. Caso contrario Capcom podría haber perdido otro de sus títulos emblemáticos.