Hace menos de dos semanas anunciábamos la última inyección de capital cifrada en 75 millones que el proyecto de Oculus Rift había recibido. Constatábamos entonces las enormes esperanzas depositadas en un sistema llamado a revolucionar el videojuego como no lo ha hecho ninguno de los recientes saltos generacionales, y que progresivamente va dando nuevas muestras de lo que nos ofrecerá cuando llegue a las tiendas.
Pues bien, la última noticia sobre Oculus Rift llega con el fichaje de David DeMartini, cuyo currículum incluye el cargo de vicepresidente senior de ni más ni menos que Electronic Arts. Su incorporación al proyecto la hace en el cargo de jefe de publicación a nivel mundial, con un cometido tan relevante como asegurar un buen catálogo para el sistema.
"Lo que hago en Oculus no difiere particularmente de lo que hice durante siete años en EA como parte del programa de socios de EA", explica DeMartini. "Estoy tratando de dar con la forma de asociarme de manera efectiva con grandes y pequeños desarrolladores, todo hasta esas personas que sencillamente quieren hacer algo grande con Oculus Rift", añade.
En los planes de DeMartini se dibuja una agenda intensa para los próximos meses: debe viajar por todo el mundo para reunirse con los principales estudios catalogados como AAA, a los estudios de producciones medias y ellos sin descuidar a desarrolladores indie. Además anuncia que tienen nuevas ideas para su plataforma Share, concebida con semejanzas a la de Steam y que se verá transformada en breve para facilitar la labor de los creadores de videojuegos que trabajen para Ocolus.