Recordábamos a Zool en nuestro número impreso de marzo, en el que hablábamos de lo que supuso en la historia de la informática y del videojuego el mítico Commodore Amiga, y lo que representó la caída de otra máquina que lo tenía todo para triunfar, en los tiempos en que Apple todavía no había descubierto cómo crear una filosofía de marketing basada en la diferenciación, y en que la simple idea de tener entre manos algo mejor podía convertirse en un inconveniente, arrogancia y excesiva confianza mediante.
El tema en concreto nos lleva de lleno a principios de los 90, con la anunciada revolución Amiga en que tras los buenos momentos vividos con Amiga 500 (la revisión que ha llevado a la popularidad del formato inicial, presentado como Amiga 1000), Mario y Sonic reinan en el videojuego como representantes de Nintendo y Sega respectivamente, anunciando la definitiva irrupción de las consolas en un mercado que antes tenía una enorme representación de los ordenadores.
Bajo la percepción de que el carisma de ambos personajes tenía un cierto protagonismo en el éxito de ambas consolas, Gremlin Graphics, una compañía veterana en el sector, se anota el tanto de presentar la que sería la mascota del Amiga: Zool.
¿Eso ha sido un anuncio de caramelos con palo?
¿Eso ha sido un anuncio de caramelos con palo? |
El juego nos presentaba a un Ninja con aspecto de hormiga proveniente de la dimensión N, en un título de acción y plataformas muy colorista y dinámico, en la línea de los títulos de las otras mascotas nombradas, pero con especiales referencias a Sonic. De hecho, se proponía abiertamente rivalizar con él como evidenciaba la escena final de la primera parte, golpeando a un puercoespín azul en una muestra de simbolismo rudo.
Su gran versatilidad y gusto por sus decorados caramelizados (sponsor de Chupa Chups de por medio: la mercadotecnia ya funcionaba por aquel entonces) eran otras de sus señas de identidad. No obstante, su inicial lanzamiento para Amiga y el hecho de acompañar alguno de los packs del Amiga1200 no sirvió para que Gremlin buscara fidelizar esa rentabilidad, desvinculándolo de una exclusiva de tal que terminaron por publicarse versiones para Atari, Super Nintendo, Megadrive, PC... y prácticamente cualquier soporte del momento incluyendo al intento de Atari en consola que fue Jaguar.
Volviendo a intentar alianza prioritaria con Amiga, y viendo el éxito de ventas en Amiga (casi llegó a las cifras de Sonic 2) se intentó que en la consola Amiga CD 32 fuera el título de salida, pero en Gremlin no llegaron al plazo marcado: el juego llegó tarde y con el tiempo los usuarios fueron apreciando que tanto Mario como el Sonic de aquellos tiempos eran títulos con una dificultad mucho más nivelada y hechos para trascender en el tiempo, cosa que Gremlin no logró con su personaje. Con la compañía siendo parte de diversas sacudidas empresariales (y no precisamente ligeros: de pasar a llamarse Gremlin Interactive, adquirieron a DMA Design -creadores de GTA y Lemmings- para finalmente ser engullidos por Infogrames) la mascota se diluyó y olvidada por el paso del tiempo difícilmente volvamos a verla relanzada.
Zool, colorista y caramelizado a más no poder
Zool, colorista y caramelizado a más no poder |