En la segunda mitad de los 90 surgieron para las consolas de nueva generación una serie de juegos que venían a conformar un nuevo género temático, el survival horror, que ha terminado por convertirse en uno de los mas populares. Con el ilustre precedente de '“Alone in the Dark”', títulos como '“Resident Evil”'o '“Silent Hill”' se han convertido ya en verdaderos clásicos conocidos por todos los aficionados, si bien dichas sagas no son las únicas que han acelerado el pulso a los sufridos jugadores, destacándose por encima de las numerosas copias y/o plagios la saga que nos ocupa.
La Lucha Interior
Dos años después del relativo éxito del la anterior entrega Human lanzaría la secuela, pero lo cierto es que esta prácticamente lo es de nombre pues la relación con el precedente viene a ser nula. La nueva entrega, titulada de “Clock Tower II: The Struggle Within” (“Clock Tower: Ghost Head” en Japón) eliminaba al psicópata de las tijeras gigantescas y nos ponía en la piel de Alyssa Hale, una joven estudiante que padece un desequilibrio mental que la dota de una doble personalidad cruel y asesina llamada Bates (en clara referencia al clásico de Hitchcock) que sale a la luz cuando la joven se desprende de un amuleto regalo de su padre, científico de unos los laboratorios farmacéuticos y gracias al cual se verá involucrada en una trama que gira en torno a un demente científico llamado George Maxwell y a una toxina mortal que convierte aquellos que infecta en una especie de psicópatas zombificados.
Haciendo uso de la misma modalidad de juego, mediante el cursor, la mecánica del mismo da sin embargo un giro de 180º pues en lugar de ocultarse el jugador debe ir eliminando sistemáticamente mediante el uso de armamento variado a los monstruos que le salen al paso, eliminando la mayor virtud del original y convirtiendo esta entrega en un clon mas de la saga zombi de Capcom, siendo la única diferencia la doble personalidad de la protagonista que, dependiendo de si actúa como Alyssa o como Bates tendrá unas habilidades u otras, pudiendo acceder a determinadas áreas conforme sea uno u otro quien domine la situación, un recurso original pero que acaba por ser tedioso. Debido a esto, el horror y suspense esperados se diluyen, a lo que tampoco ayudan un apartado gráfico bastante deficiente para la época ni una duración excesivamente corta, si bien, al igual que el anterior, el nuevo juego posee varios finales diferentes (hasta un total de 13) que permiten sacarle algo mas de partido a un juego que viene a ser la oveja negra de la saga y que permanece inédito en nuestro país.