Coincidiendo con el anuncio de que el gobierno de EEUU va a endurecer de forma sustancial las filtraciones en la red (considerándolas como 'traición', según algunas fuentes), Microsoft ha salido a la palestra a proteger los contenidos de uno de sus títulos más esperados, Gears of War, cuyo material ha llegado a la red meses antes del lanzamiento del videojuego.
"Hemos visto los informes de Gears of War 3 sobre sus contenidos filtrados en internet, y estamos trabajando con nuestros equipos de seguridad y las fuerzas del orden para reconducir la situación", explican desde la compañía. Además, creen que lo publicado -mayoritariamente en Youtube- no sólo les impide tener un control efectivo sobre la campaña de imagen del producto a la vez que daña a los propios usuarios con los spoilers, sino que es poco representativo de la calidad final del producto: "hablamos de contenido que no pertenece a la versión final, por tanto no es representativo de lo que los seguidores de Gears of War disfrutarán cuando el juego salga a la venta el 20 de septiembre de 2011".