"Necesitamos franquicias clave y títulos de la casa que sean verdaderamente fuertes", explica Reggie. Con Zelda puntuando de forma satisfactoria ("está vendiendo excepcionalmente bien ahora, apoyando al hardware") y StarFox respaldándole ("hemos visto similares resultados a Zelda en Japón"), Reggie está convencido que el futuro es prometedor con dos Mario en el horizonte: Super Mario 3D fijado para noviembre, Mario Kart (calificado en varios lugares como el juego más esperado) para el próximo diciembre.
Otros inconvenientes que dejaron la oferta inicial de Nintendo corta y que Reggie ve ya solventadas son la eShop, que llegó unos meses después del lanzamiento de la consola, y un Netflix ofertando un buen catálogo de vídeo.
"Debían haber salido en antes, más cerca del período de lanzamiento, por eso hemos tenido que bajar ahora el precio y volver a crear un nuevo periodo de ventas fuerte". Algo que debe funcionar de forma muy eficiente si quieren cumplir con las previsiones de vender 16 millones de consolas en su primer año.