Las pérdidas de Nintendo podrían aumentar, según la propia compañía, que culpa a la debilidad del yen frente al euro de la situación por reducir su rentabilidad fuera de Japón.
Según la publicación de Nikkei, que se hace eco de las cifras (100 mil millones de yen, por los 4,1 del ejercicio anterior), la 3DS y sus cuentas tendrían un papel en la jugada. "Es inevitable que Nintendo haya perdido las estimaciones y la compañía podría verse forzada a reducir previsiones por la falta de software", declara el tabloide. La bajada de precio inevitable por las escasas ventas, tendría un papel indiscutible en ese fallo en las previsiones, nuevamente según la publicación.
Los inversores de Nintendo, que recientemente llegaron a exigir a la compañía que exportara sus licencias a otros soportes (fundamentalmente por la moda 'móvil' de tablets y terminales de telefonía), deben haber encajado mal la noticia acostumbrados a estar con caballo ganador. Tampoco les habrá hecho gracia que en este contexto se desvele que Nintendo ha estado 11 años desarrollando videojuegos de Kirby -tres concretamente- que finalmente fueron desechados.