Sonic Generations ha subido la apuesta de los esfuerzos de Sega por tener un capítulo que rinda culto al personaje debidamente, logrando gustar a los usuarios veteranos, quienes generalmente acaban desencantados con sus nuevas entregas.
Habiendo aprendido mucho de cómo recuperar clásicos manteniendo sus señas de identidad, el único problema de Generations -hecho para celebrar el aniversario de Sonic- es cómo continuar. Algo que deberán resolver pronto, puesto que en 2012 ya quieren un nuevo título de Sonic, dentro de su dimensión más 'moderna'.
Takashi Iizuka parece tener las ideas claras como productor de Sonic, a la hora de explicar cómo van a renunciar al planteamiento clásico para seguir innovando: "me gustaría definir un nuevo estándar de Sonic, un Sonic moderno si lo prefieres, desde 2012 en adelante". "Ha habido muchos Sonic en el pasado y en este punto hay una idea bastante buena de lo que Sonic debe ser: un juego divertido y frenético. Hay necesidad de sorprender a los fans de formas creativas e innovadoras, pero no hay que alejarse de su esencia. Los colores de Colors responden a ese enfoque".
A juicio de Iizuka -y probablemente para alargar la vigencia de su cargo- un factor determinante en los altibajos de Sonic ha sido la falta de "un productor consistente", con demasiados soltando sus ideas y llevando a la indefinición presente en los últimos años.
En todo caso, el principal problema de Sonic, puesto que sin él cabrían excusas sobre la evolución de los gustos o las nuevas necesidades de las audiencias, es Mario, capaz de venderlo todo y dejar a todos contentos tanto cuando se trata de recuperar al clásico Mario Bros en Wii, como cuando se reinventa el género en Mario Galaxy.