“Noctropolis” fue además uno de los primeros juegos en utilizar actores de carne y hueso para dar vida a los personajes, intercalando imagen real con fondos diseñados por ordenador y/o dibujados, desplegándose una serie de ventanas para las escenas de diálogos. Pese a lo novedoso del proceso, lo cierto es que la combinación de ambos tipos de imagen resulta bastante rudimentaria, con movimientos muy poco fluidos y -en la mayoría de ocasiones- una interacción con el entorno chirriante. Los fondos eso si estaban cuidadosamente diseñados y plasmaban con todo detalle los diferentes entornos manteniendo en todo momento el ambiente de cómic con localizaciones como las catacumbas del villano Maestro Macabro o el parque de atracciones donde nos transporta la pesadilla de Morfeico. Los personajes estaban interpretados por un grupos de actores de reparto habituales del cine de serie B (lo cual potenciaba aún mas el estilo de pastiche del conjunto) donde destacaban la modelo Brittney Lewis como la vampiresca Succubus y la Playmate Hope Marie Carlton dando vida a la atractiva Stiletto, además del cameo de Shaun Mitchell como un fanfarrón guarda de seguridad.
En el apartado sonoro sobresalía por méritos propios la magnifica banda sonora adecuada en todo momento a los distintos ambientes y que incluía un potente tema central muy en la línea de la partitura de Danny Elfman para las aventuras del hombre murciélago. En lo referido al manejo el esquema era el habitual para las aventuras gráficas, con una tabla de comandos a ejecutar mediante el puntero del ratón y basándose las acciones en la recogida y uso de los mas variopintos objetos. La dificultad por su parte era bastante reducida y, salvo un puzzle o dos, no ofrecía demasiadas dificultades al jugador medio.
Sencillo y adictivo, el juego nunca fue un superventas al estilo de “Monkey Island” o “Broken Sword” pero resultó lo bastante llamativo como para generar un pequeño culto a su alrededor que crece dia a dia entre los seguidores de las aventuras gráficas. Una pena que nunca llegase a elaborarse una secuela, aunque sus seguidores saben que, en alguna parte, Tenebroso sigue al pie del cañón en su lucha contra el mal.