Michael Pachter, el conocido analista del videojuego cuyo nombre se cita con enorme regularidad, vuelve a la carga contra Nintendo. Lo hace a propósito de la sucesión de Wii -la conocida como Wii U- y con una contundencia tal que le lleva a compararla con la Dreamcast -extinta última consola de Sega- en cuanto a complicado futuro.
Tardía y no suficientemente barata. Estas son a su juicio las dos principales trabas para que la compañía pueda hacer de Wii U algo parecido a su predecesora, una Wii que apoyada por el marketing, los bajos precios y el efecto 'cool' que venía ya de su nombre, arrasó en públicos inéditos.
"Es demasiado parecida a Xbox 360 en términos de gráficos, frame rate y control de escena, y no creo que ni puedan sacarla a 150 dólares", explica. A su juicio, los consumidores preferirán ahorrar para Xbox 720 o Playstation 4, remata sus duros pronósticos.