Christian Svensson, vicepresidente de negocios y estrategia de Capcom, lo tiene claro: Resident Evil 6 es la referencia. Su lanzamiento, previsto para el 20 de noviembre, podría entenderse como un reto ante un terreno tan competitivo -plena efervescencia de ventas navideñas, los mayores títulos buscando hueco-, pero él tiene tan claro su dominio que es categórico: "avisamos de nuestra llegada, damos tiempo a la gente para que se aparte".
El mensaje es tan contundente, que no entiende ni de nombres tan simbólicos como Grand Theft Auto, que con su quinta parte (y pese a recientes pronósticos que publicamos en este medio) podría llegar para competir por las ventas navideñas con Resident Evil. Va a ser "el más grande de todos", afirma refiriéndose a la propia franquicia, y quizá a las ventas del año (si lo primero se cumple y el público acompaña, podría lograrlo con permiso de nombres como el mencionado o Call of Duty).
Preguntado sobre la competencia dentro de la propia marca -la posibilidad de que la sexta parte reste repercusión a otros Resident Evil- entiende que la apuesta no solo es segura, sino que ya puede decirse que salió bien: "pensamos que el anuncio de la sexta parte podría de hecho suponer un toque de atención sobre otras cosas de Resident Evil, y así fue [...], nuestras reservas de Raccoon City y Revelations crecieron tras el anuncio".