Teniendo en cuenta los años de vida de Xbox 360, quizá ya pueda juzgarse a la segunda consola de Microsoft. Habría que calificar entonces de éxito rotundo el producto de una compañía que con la primera Xbox aparecía como intrusa en un sector en el que no parecía sentirse cómoda.
Ahora, cabe pensar que sus movimientos fueron acertados en la sucesión. Aprendieron de la primera máquina, publicaron cuando debían hacerlo, y la diferenciación frente a Wii y la lenta conquista de Playstation 3 ha permitido que en el último ciclo de vida de la actual generación Xbox 360 siga liderando.
Así, la diferencia no será tan enorme como en otros momentos, pero los 67 millones de consolas vendidas según Microsoft, la dejan 3 por encima de los 64 de Playstation 3. Algo que nos remite a las matemáticas: a poco que Wii hubiera vendido consolas (cosa que hizo y con cifras de récord) el 47% del mercado de consolas que Microsoft reclama suena a brindis al sol.
En todo caso, todavía queda trayecto para Xbox 360, que en el próximo E3 centrará muchas de sus novedades en Kinect, un sistema revolucionario que según datos de la compañía ha logrado los 19 millones de unidades vendidas.