Respecto a la forma de enfrentarnos al rival, nuestro inicial repertorio de armas se irá viendo incrementado de la forma habitual, y nuestras principales cualidades y recursos (puntería, destreza, botiquines…) se podrán incrementar cuando al finalizar la fase administremos los puntos conseguidos a nuestro gusto para reforzar aquella faceta que consideremos más importante. Además, al arsenal con que nos hagamos hay que añadir los varios tramos del juego en que subimos a vehículos donde manejamos sus propias ametralladoras (helicópteros, camiones...), una parte tan importante como muestra que así tenga lugar el primer tramo de su desarrollo.
Durante el juego y con nuevas similitudes con Conflict, podremos recavar la ayuda de nuestros compañeros a nivel de munición y energía, de forma que la recolecta de restos de los rivales vencidos que es tradicional, aquí queda marginada por el autoabastecimiento.
Aspectos técnicos
Volviendo a la comparación con soporte compatible, la versión Ps2 ha sido rehecha acoplada a sus posibilidades, y si no se la juzga en referencia a otra, el apartado gráfico con sus carencias y aspecto austero e incluso reiterativo, sí cumple. El escenario es el que es y da la sensación de serlo. No hay un gran acabado y detallismo ni en los interiores de las estancias ni en el repertorio de enemigos, pero esto no es un obstáculo y la credibilidad no se pierde en ningún momento. Acaso por una linealidad en ocasiones excesivamente cerril y explicable por lo taxativo de las misiones militares, que en algunos momentos llega al absurdo y si nos subimos por la duna que no toca nos dará lugar al apercibimiento en tono de bronca del jefe de operaciones, o a la anulación de misión si queremos indagar en qué hay más allá de lo programado.
A nivel de sonido, los silbidos de las balas, las voces dobladas de nuestros compañeros y los ritmos étnicos que se filtran suavemente dando la mayor parte del espacio a los fx, son de una corrección algo superior a la gráfica, pero que viene a reiterar la idea de cumplimiento.
Por ello, la base principal es la de una jugabilidad muy asequible y agradecida que gustará fácilmente al usuario medio –quizá incomodará algo a los más acérrimos a la simulación y por la mínima IA del enemigo– y que encontrará en su modo multijugador la mejor forma de apaciguar las odiosas comparaciones entre versiones.