Las misiones a su vez tienen por objetivo conseguir una serie de tarjetas y únicamente acumulando un número concreto de las mismas podremos avanzar, aunque algunas de ellas no se logran mediante el cumplimiento de una tarea sino que están escondidas y/o situadas en lugares en apariencia inaccesibles por el amplio mapeado, obligándonos a estar ojo avizor y agudizar nuestro ingenio. La dificultad de dichas misiones va variando a lo largo de la partida aunque en esta ocasión no existe la posibilidad de determinar el nivel de dificultad (en el sentido de opciones de menú el juego es más bien escaso).
Aspectos técnicos
A nivel gráfico hay que resaltar lo bien que se ha realizado el trasvase del original cinematográfico, ya que la estética “claymation” permanece en su versión digital con toda la expresividad y detalles que caracterizan a las creaciones de Nick Park. Otro tanto se puede decir de los decorados, resultones y bien modelados, completados con un eficaz “manejo de cámara” que nos permite variar la perspectiva a nuestro gusto.
En el apartado de sonido encontramos un repertorio de eficaces melodías similares a aquellas con las que solía deleitar al jugador los juegos de plataformas. También los efectos de sonido logran su propósito a la hora de sintetizar el estilo de los dibujos animados originales, fidelidad que se acrecenta al contar Wallace con la voz del actor Peter Sallis, encargado de doblar al personaje en todas su historias hasta la fecha (voz que se mantiene en la versión española que ha decidido, como es habitual no doblar el juego y añadir los correspondientes subtítulos).
Conclusión
Sin suponer ninguna revolución, esta nueva incursión de Wallace y Gromit en el mundo del videojuego (tras “Project Zoo”, perteneciente al género de las plataformas) ofrece un entretenimiento asegurado y adictivo al 100%, si bien la falta de opciones y su poca dificultad pueden ser un escollo para aquellos que busquen un reto mas duradero. Por otro lado su fidelidad al original le convierte en una cita imprescindible para los fans del chiflado inventor y su peculiar mascota que no puedan aguantar la larga espera hasta la próxima aventura del dúo.