El pasado jueves 16 de noviembre Nintendo España presentó en Madrid su inminente consola de nueva generación. En el acto celebrado en el en el estadio Santiago Bernabeu, una importante cantidad de consolas a cuyo alrededor se formaban colas para poner en práctica un nuevo concepto de juego, dejó ver las cualidades del que va a ser uno de los juguetes más demandados de las navidades del 2006 -ante la falta de competencia de Sony y la duda sobre si X-Box 360 llegará a calar como merece técnicamente-. De esta manera, la máquina mostró con su catálogo inicial de juegos las que prometen ser sus mejores cualidades y en qué sentido va dirigido su apuesta.
De lo visto puede deducirse que Wii supone ante todo la reinvención del videojuego y el esfuerzo por encontrar un modo alternativo de implicar al jugador. Contra la perspectiva más sedentaria, títulos de salida como Wii Sports demuestran que al entretenmiento digital le ha llegado la hora de incorporarle actividad física. Jugar al golf, al tenis, al boxeo, al beisbol en el salón de casa ha pasado a ser una realidad cercana, siguiendo la estela de otros planteamientos interativos como el de la eye-toy de Sony. Con decorados emulando campos de golf, pistas de tenis o rings de boxeos, pudo verse cómo jugadores se enfrentaban entre ellos de una forma similar a la que lo harían en las prácticas de estos deportes, si bien rodeados de una perspectiva entre freak y futurista.
En lo que se refiere a otros juegos más tradicionales, la nueva entrega de Zelda que debutará con la consola fue uno de los ejemplos más nítidos de cómo sacar partido de las posibilidades del interfaz. El pequeño mando, ergonómico y con su conocida estructura más próxima al mando de TV, servía en esta ocasión para ejecutar los golpes del archiconocido Link en tanto nos seguíamos desplazando de un modo más tradicional. Pescar, lanzar flechas o utilizar la espada quedaba pues en manos de un novedoso control con el que se gana una nueva perspectiva mucho más activa.
Nuevas entregas de Metroid, Call Of Duty o Sonic pusieron de relevancia las distintas formas de sacarle partido. No obstante, también desvelaron la que por otro lado era una tendencia anunciada con los primeros datos del producto y que sigue el mismo camino que Nintendo ha emprendido con DS respecto a PSP: el avance no se concreta en un despliegue técnico muy superior, quedando por debajo de X-box 360 y Playstation 3 en apartados gráficos. ¿Serán sus novedades suficientes para reorientar un mercado que vive en permanente preocupación por superarse desde el lado técnico? A partir del día 9 de diciembre, la duda se irá resolviendo.